Juan Antonio Galán Romero publica en breve la novela El Tránsito, un relato zombie que propone un nuevo enfoque muy original dentro de este popular género fantástico.
Sinopsis:
La salvación puede casi tocarse con los dedos. Los infectados han ido languideciendo víctimas de la lluvia que todo lo pudre y de una dieta escasa en carne humana. La resistencia ha logrado acorralar a sus depredadores, que se agrupan para luchar con un innombrable sentido comunitario ante una extinción que casi parecen comprender. Sin embargo, toda guerra incluye un último día de cruenta batalla lista para pasar a los anales. En ese capítulo casi patético de la historia, cuando la supervivencia se antoja tangible y todos se preparan para volver a contemplar el sol después de larguísimos años de ausencia, Germán se erige como el último mártir, el último cruzado contra la invasión de los infectados. De su aventura de soledad y miedo no solo depende su vida y la felicidad de su mujer y sus hijos, Germán arrastra consigo la responsabilidad de brindar un final épico a la pesadilla digno de ser contado a las generaciones que empezarán a vivir sin la amenaza de las dentelladas.
Germán se encuentra en plena huida de uno de los últimos grupos de infectados que pueblan la tierra junto a su mujer, Cecilia, y sus dos hijos, Mario y Sofía. En el momento en que acaricia el helicóptero que lo pondrá a salvo junto a los suyos, Germán es mordido por un infectado.
A partir de ahí, surge la paradoja. Germán sufre un deterioro físico que sin embargo no deriva en la esperada transformación. Decide continuar su periplo al lado de un grupo de infectados, observándolos, estudiándolos pensando cómo usar su aprendizaje en su propio beneficio.
En la resistencia, que acaba de acoger a la familia de Germán, las decisiones las toma una minúscula cúpula militar. Por un lado aparece el impulsivo y violento general Escobar, por otro, la templada y heroica teniente Navarro.
Poco a poco todo acaba volviéndose vertiginoso. Los militares acechan al grupo de Germán, éste descubre que no es el único que no acaba de transformarse… Pero su cuerpo sigue corrompiéndose y cada vez están más acorralados. ¿A qué bando pertenece Germán?
